martes, 11 de enero de 2011

LOS ANTIGUOS MEXICANOS

El tiempo ha transcurrido y otras culturas se han ido entrelazando por todo el mundo, desde tiempos inimaginables e impensables (más de cien mil años de historia humana) además de difícil de comprobar, ha existido la humanidad, ha ido “evolucionando” y “aprendido día con día”… Y México no fue la excepción.

Se sabe que los antiguos Mexicanos (llámense Olmecas, Mayas, Aztecas, Toltecas e infinidad de nombres que descienden de la misma raíz Atlante) eran personas que hacían pirámides majestuosas, que se regían por los ciclos de luna y del sol, que utilizaban penachos, que sacrificaban a sus víctimas aun siendo niños, que en las pocas tumbas encontradas se encontraban piedras preciosas, pedernales, etc., que poseían una cultura rica en astrología y conocimientos en bruto, así mismo conocen que casi no tenían ropa, que eran un poco sanguinarios, feroces e incivilizados (ese término utilizado por los conquistadores quienes si utilizaban jabón y perfume).

Pero mas allá de eso no se sabe más, no hay más que tecnicismos, deducciones y especulaciones, hay más por saber o etender y no solo lo que todo el mundo dice, que les gustaban las serpientes, las águilas,  los jaguares y están llenos de símbolos. Estas personalidades eran imponentes, inteligentes, sabias y bastante curiosas, poseían un conocimiento fuera de serie, visitaban mundos que en nuestro tiempo es equivoco e ilógico (ya que nuestro sistema se basa en que si no es comprobable no es veridico) que llegue a pasar aun cuando se saben que poseen los sistemas más perfectos que en la historia se tenga registrado, se enseñaban a ser  Guerreros de vida y a su vez explotar sus talentos, desde el agricultor hasta el brujo trasportador de esferas galácticas

Conocían a la perfección las actividades astrológicas, astronómicas y herbolarias; y no solo las conocían, sino las VIVIAN,  las practicaban y las sentían, era un lazo cuerpo físico, mental y cuerpo etéreo, eran los portadores principales de este y otros mundos desconocidos, tenían contacto ante lo inconcebible, lo inconmensurable, lo desconocido, ante lo orgánico y lo inorgánico  y todo lo que nuestras cabecitas occidentales no pueden comprender por qué asi se nos ha enseñado.

Maestros  (as) libres, brujos sanadores (as), chamanes intrépidos, naguales guías en perfecta armonía, que aceptaban su destino desde el momento de nacer hasta el de su maravillosa muerte.
Gente satisfecha con lo que era y tenia, donde no existía el materialismo, el dolor, la pereza, la codicia, el miedo, la sumisión y el odio. Niños que no eran niños, sino mas bien personas que estaban en proceso de entendimiento y por eso a su mayoría de edad ya sabían lo que tenían que hacer y cómo hacer.
Una humanidad unánime con valor mismo, nadie era más que nadie, todos estamos en medio decían, no somos más que hombres en un mundo maravilloso el cual se le debe respeto.
Sus dioses no eran a semejanza, veneraban a la naturaleza, su modo de vida era libre, sin apegos ni envidia…. Eso y más eran ellos.

¿Cómo es que sabemos más de otras civilizaciones más que de la nuestra?

Desafortunadamente se convirtió en un pueblo conquistado, en un pueblo devastado, humillado, sobajado, asesinado haciendo que nuestras enseñanzas irremediablemente hayan sido calladas,  ocultas y absorbidas por costumbres, lenguas y tradiciones menos interesantes y mas frívolas, menos libres y mas sometidas, mas materiales y menos espirituales.

Y se siguen preguntando ¿Cómo pudo suceder?

Es así como comienza uno de los objetivos de este blog, tratar de profundizar, re-descubrir, divulgar y poner en práctica esas  enseñanzas, nuestras enseñanzas que por miles de años ha sido mal entendidas pero que aun vagamente siguen vivas.

Angélica Trujillo

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